¿Te acuerdas de cómo fue la incorporación a tu puesto de trabajo actual? ¿Tuviste un buen primer día de trabajo? Seguramente no todos los que lean este artículo recordarán su primer día de trabajo como una experiencia positiva. Desde primera hora las empresas establecen el vínculo y la relación que van a tener con sus empleados. Actualmente existe una tendencia en auge para fidelizar el talento que cada vez cobra mayor relevancia, esta tendencia se conoce como onboarding.
El onboarding es una técnica que usan las empresas para que los nuevos empleados se adapten a la rutina de la organización en el menor tiempo posible y comiencen a ser eficientes cuanto antes. Su principal objetivo es que el empleado se integre lo antes posible en la organización.
Pero, ¿en qué consiste realmente? Pues en proporcionarle al nuevo trabajador toda la información importante sobre su día a día, dónde va a desarrollar su actividad, quiénes son sus compañeros, sus jefes, qué tareas y responsabilidades tiene y las herramientas que dispone para desempeñar sus labores.
La gestión que se haga de la nueva incorporación es clave para determinar el éxito o el fracaso de la operación que se inició con la oferta de trabajo. El proceso de onboarding busca que el nuevo empleado se adapte a su rutina rápidamente y alcance un alto nivel de bienestar con un rendimiento adecuado. De esta manera, la organización se está asegurando que su nuevo empleado hable bien de ella. Dicho con otras palabras y para simplificar un poco la idea, la empresa estaría trabajando en promover una buena imagen de marca.
Ahora que ya conoces la importancia de esta técnica para tu empresa, vamos a explicar paso a paso como lograr estrechar el vínculo entre la propia organización y sus empleados; para ello es primordial establecer una metodología de trabajo incluso desde antes de que se elija al nuevo trabajador. Por lo tanto, el proceso de onboarding es necesario que se prepare previamente y para ello hay que establecer unas fases o pasos a seguir.
Primero estableceremos un programa de integración que consiste en dar la bienvenida al nuevo empleado adecuadamente. Habla muy mal de una empresa que el primer día de un trabajador aún no sepa dónde va a ubicarse físicamente esta persona, que no disponga de un espacio adaptado al perfil del nuevo empleado. Con esto queremos decir que un par de días previos a su llegada hay que disponer de un espacio equipado con todo el material de oficina necesario así como un equipo de ofimática si se requiere, cuenta de correo electrónico, etc.
Otro punto clave es que el empleado se sienta ilusionado por comenzar en su nuevo trabajo. La empresa puede generar este entusiasmo enviándole un mail un par de días antes de su incorporación dándole la bienvenida. Es habitual en algunas empresas que los nuevos trabajadores reciban en su primer día una carpeta de bienvenida donde se recoja el código de conducta de la empresa, se repase un poco su historia y sus valores.
Por otro lado, también es conveniente asegurarnos de que el empleado conozca a sus compañeros de trabajo cuanto antes. A todos nos pasa que nos hemos sentido incómodos alguna vez porque no nos acordábamos del nombre de alguno de ellos. Solucionar este problema es sencillo, simplemente tendremos que facilitarle un directorio de equipo con el nombre, puesto y una fotografía de todos los empleados. Este método es muy novedoso y apenas está empezando a incorporarse, pero la realidad es que los empleados nuevos lo agradecen enormemente. No debemos olvidar que conocer al equipo de trabajo del que formará parte es fundamental para crear vínculos y fomentar la comunicación.
El siguiente punto importante, es que los empleados que se van a ver afectados por una nueva incorporación y por tanto, por el proceso de onboarding debe estar informados con tiempo para que sepan qué se espera de ellos. Es recomendable que se le haga llegar un informe mediante correo electrónico con toda la información. ¿Te imaginas que al llegar a tu nuevo trabajo ya todos saben cómo te llamas? ¿O que una persona te esté esperando en la recepción para presentarte a todos y enseñarte dónde se encuentra cada cosa? ¡Sería magnífico y te haría sentir mucho más cómodo desde el primer momento!
Una vez que hayan transcurrido un par de meses o tres debemos comprobar si el objetivo primordial de este plan se ha cumplido, de modo que este proceso necesita de un seguimiento para determinar su éxito. Hay que cerciorarse de que el empleado está completamente integrado en la organización y se ha creado un vínculo de confianza.
Las organizaciones realizan un gran esfuerzo para llevar a cabo procesos de selección de personal que atraiga talento para contratar a los mejores profesionales en cada área. No obstante, este proceso no termina una vez que se elije al candidato sino que debe ser completado por una fase de integración para lograr que los nuevos empleados tengan una buena experiencia. De lo contrario, es muy probable que el trabajador se haga con una imagen negativa de la empresa, sea esa mala imagen la que transmita y dure muy poco formando parte de ella.
Si no se le dedica a esta fase la atención y el tiempo necesario, a largo plazo será contraproducente para la propia organización, que tendrá que invertir más en contratar a nuevos empleados por su incapacidad para retener talento.
El éxito de un proceso de onboarding se mide por el nivel de adaptación, bienestar y felicidad del trabajador, que en un ambiente amigable se siente motivado para mostrar su talento. De manera que ambos, organización y empleado, se sienten satisfechos en esta relación laboral.
Si tu empresa necesita asesoramiento para realizar un proceso de selección y onboarding que atraiga a profesionales con talento y los fidelice, ponte en contacto con nosotros en el 91 598 90 00.
CONTACTO
Distrito Telefónica, Ronda de la Comunicación, s/n,
28050 Madrid
Tel. 91 598 90 00
e-mail. [email protected]
AGENCIA DE COLOCACIÓN
Nº Aut.: 1300000012
EMPRESA DE TRABAJO TEMPORAL
Nº Aut. Adva.: 28/0105/96